La Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados aprobó hoy el texto definitivo de la Ley de Memoria Histórica que pasará a ser discutido en el Pleno de la Cámara, previsiblemente el día 30 ó 31 de octubre. El texto de la ley contó con los votos favorables de IU-ICV, PSOE, CiU, PNV y CC en la práctica totalidad de sus artículos. A la mayoría del articulado se opusieron tanto ERC como el PP, no obstante los ‘populares’ acabaron apoyando algunos artículos referidos a la mejora de indemnizaciones ya existentes a las víctimas del franquismo.
La modificación más importante introducida hoy al texto se produjo a instancias de IU-ICV para plasmar en la práctica una reivindicación histórica de los exiliados. A través de una enmienda transaccional se modifican diversos apartados de la ley para que puedan adquirir la nacionalidad española los hijos y nietos de los exiliados que la perdieron como consecuencia de la Guerra Civil y la dictadura.
En concreto, el texto aprobado crea una disposición adicional nueva bajo el epígrafe “Adquisición de la nacionalidad española” que en su primer punto señala que “las personas cuyo padre o madre hubiese sido originariamente español podrán optar a la nacionalidad española de origen si formalizan su declaración en el plazo de dos años desde la entrada en vigor de la presente Disposición Adicional. Dicho plazo podrá ser prorrogado por acuerdo del Consejo de Ministros hasta el límite de un año”.
En su punto segundo indica que “este derecho también se reconocerá a los nietos de quienes perdieron o tuvieron que renunciar a la nacionalidad española como consecuencia del exilio”.
Además, se añade otra disposición adicional también a instancias de IU-ICV sobre “Acceso a la consulta de los libros de actas de defunciones de los Registros Civiles”. El texto recogido en una enmienda transaccional señala que “el Gobierno, a través del Ministerio de Justicia, en cuanto sea preciso para dar cumplimiento a las previsiones de esta ley, dictará las disposiciones necesarias para facilitar el acceso a la consulta de los libros de las actas de defunciones de los Registros Civiles dependientes de la Dirección General de los Registros y del Notariado”.
Por su parte, IU-ICV votó en contra de la enmienda pactada entre PSOE, PP y CiU en relación al Valle de los Caídos. Los dos primeros puntos de este artículo mantienen su contenido anterior para que este recinto sólo sea utilizado como lugar de culto del cementerio público y se prohíban los actos políticos de exaltación de la Guerra Civil o el franquismo.
Por el contrario, se elimina el tercer punto que había sido pactado con IU-ICV, que obligaba a la fundación gestora del Valle de los Caídos a “honrar y rehabilitar la memoria de todas las personas fallecidas a consecuencia de la Guerra Civil y de la represión política que la siguió”, así como “fomentar las aspiraciones de reconciliación y convivencia que hay en nuestra sociedad”. Este punto pasa a convertirse en una nueva disposición adicional.
IU-ICV considera que esta nueva redacción supone una “rebaja” no sólo del último texto pactado sino, incluso, sobre el proyecto inicial presentado por el Gobierno socialista, ya que se llega a suprimir la mención a los “valores de exaltación de la paz”. IU-ICV valora que estas modificaciones están motivadas por el hecho de que tanto el PSOE, como PP y CiU han sucumbido a las presiones de la Iglesia católica sobre este tema.
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